Detienen al dueño del bar “La diabla” por la muerte del “pulpo” hace un año en Santa María Chiconautla

Archivo Policiaco, Ecatepec, Méx. Agosto 12 (PGJEM).- En compañía de sus amigos, el “pulpo” se metió a robar al bar “La diabla”, ubicado sobre la carretera libre México Pachuca en Santa María Chiconautla, pero como entre gitanos no se leen las cartas, el propietario de dicho antro lo mandó matar. Esta es la historia, según las confesiones del autor intelectual y de uno de los asesinos materiales.

Angel Avilés Figueroa pagó 15 mil pesos a un sicario para liquidar a Jesús Alberto Gutiérrez Vázquez, alias “el pulpo” por lo que le pidió a Santiago Figueroa García que en la noche sacara de su domicilio al hoy occiso y se lo pusiera al asesino.

Por el favorcito Angel le dio 2 mil pesos a Santiago, quien gustoso aceptó el trabajito pues ya traía entre ojos a Jesús Alberto, quien sostenía relaciones de carácter sentimental con su ex pareja.

Así que el 21 de agosto del año pasado, el ex de la pareja del “pulpo” fue a la casa de éste y le tocó en su ventana. Jesús Alberto se asomó muy quitado de la pena sin saber que su vida estaba en peligro. Santiago le pidió que lo acompañara a comprar droga con unos cuates con los que se ganaría unos 300 pesos. El pulpo sin imaginarse lo que le esperaba aceptó.

Al salir de su domicilio, el “pulpo” fue atacado con un puñal por el sicario contratado por el dueño del bar “la Diabla”, pero Jesús Alberto era “un hueso duro de roer” y evadió la agresión y como dicen que “es mejor que digan aquí corrió que aquí quedó”, se dio a la fuga.

Pero ya estaba escrito que esa noche era la última en la vida del “pulpo”, pues al tratar de escapar de su asesino cayó en una zanja, donde el sicario y Santiago lo apuñalaron para después cubrir su cuerpo con tierra y piedras.

Tres días después fue descubierto el cadáver de Jesús Alberto ubicado en la zanja de un predio baldío ubicado en la calle Dolores esquina con avenida Las Torres de la colonia Techadotes en Santa María Chiconautla de este municipio, con siete lesiones producidas por un arma punzo cortante penetrantes en diferentes partes del cuerpo, por lo que se abrió la averiguación EM/II/10264/2007.

Pasó un año, pero por fin la policía ministerial del grupo de homicidios de Ecatepec logró la captura de Angel y Santiago, quienes confesaron su crimen, pero el sicario contratado sigue prófugo. Los agentes ministeriales continuarán sus investigaciones y esperan en breve detener a ese delincuente.

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